Laundry Lamadrid
Por: Glorimar Rodríguez González

laundry

Laundry Lamadrid hace 60 años

Esta investigación es sobre el Laundry Lamadrid ubicado en la calle Dr. Cueto en Utuado.  Mi primera entrevista fue a Carlos Gil de Lamadrid.  Este señor lleva 35 años como gerente y desde los 14 años de edad trabaja ahí.  El empezó ayudando a su papá, le hacía mandados y poco a poco fue adquiriendo conocimientos acerca del servicio que ofrece este negocio. Según el señor Carlos Gil este negocio se llama Laundry Lamadrid  por el apellido que lleva de su papá y siempre ha llevado este nombre.  Carlos cuenta que la época más exitosa fue para las décadas de los 70 a los 80.
El primer dueño  de este negocio fue el papá del entrevistado que se llamaba Efraín de Lamadrid.  Efraín estuvo trabajando en este laundry desde los años  ‘40 hasta finales de los ‘60.  Luego del retiro de Efraín, su hijo Carlos, entró como gerente. Carlos Gil me contó que su padre antes de abrir este negocio trabajaba en otro laundry y su dueño se lo vendió en $150.00.  Para ese tiempo su padre trabajaba con una plancha de carbón y poco a poco fue mejorando su situación económica.  Su madre también trabajaba en el negocio y lo ayudaba planchando y lavando ropa en el río.  Para ese entonces todo el trabajo era manual y no había maquinaria. En este negocio se han atendido personas destacadas como abogados, alcaldes, representantes de distrito, a senadores como por ejemplo a Bruno Ramos y Agosto Alicea y a artistas como Lily Delgado, cantante del grupo de Lily y su gran trío. 
La segunda entrevista fue a la señora Emelina de Jesús Rosario, de 79 años de edad, esposa del primer dueño del Laundry Lamadrid y madre del gerente actual. Ella cuenta que cuando empezó a trabajar con su esposo, tenía 20 años y utilizaba planchas de gasolina.  Se levantaba temprano a bombearlas para prenderlas y así usarlas durante todo el día.  Para planchar usaba dos tablas.   Doña Emelina narra que todo el trabajo para ese entonces era manual y toda  la ropa se lavaba a mano en el Río Viví que discurre detrás de ese primer laundry en el cual ella trabajó.   Ella tenía un cordel de un edificio a otro que pasaba por encima del río y en ocasiones, cuando el río crecía, se llevaba la ropa. 
En el 1950 su esposo compró el laundry, en el que estaba trabajando, por tan sólo $150.00.  Emelina compara $150.00 como si fuera ahora unos $20,000.00.  Efraín era tan pobre que tuvo que hacer un préstamo para poder comprarlo.  Lo que sucedió fue que el señor Damián Torres, dueño de ese negocio, cayó preso por lo de la revuelta nacionalista y se vio obligado a vender el negocio.  Para ese entonces la situación económica era tan mala que el señor Efraín trabajaba de día en el laundry y de noche en una panadería haciendo pan. Poco a poco la economía fue mejorando y empezó a comprar maquinaria para el negocio. Emelina se casó con el señor Efraín a los 18 años de edad, cuando él era empleado del laundry que finalmente compró.
A principio de los años 60 esta familia decidió  comprar el local del laundry actual.  Ellos se lo compran a la familia Marrero.  Cuenta la señora de Jesús que este edificio llegó a ser un cine y una farmacia y la familia siempre vivió en el segundo piso.  La familia Marrero, dueños de este edificio, se fueron en bancarrota y se vieron obligados a vender el edificio.  La situación económica estaba estable para la familia Lamadrid.  Decidieron vender la casa que estaban viviendo en $35,000.00 y con ese dinero pagaron unas deudas y compraron el edificio.  La propiedad aunque estaba deteriorada fue adquirida por la familia Lamadrid en $15,000.00. El señor Efraín, luego de comprar el edificio, remodeló primero la planta de abajo montando el laundry y luego remodeló el segundo piso donde vivió con su familia.
Efraín lleva 15 años de muerto.  En la actualidad dos de sus hijos y sus respectivas esposas trabajan en el laundry.  Doña Emelina actualmente cose, plancha toda la ropa de almidón de mujer, pone “zippers”, coge ruedos y hace todo lo que tenga que ver con costura en el laundry.  Ella dice, entre risas, que todo se queda en familia.
Cuenta doña Emelina que antes Efraín les enseñaba a los niños del vecindario a planchar y de hecho, uno de esos niños en la actualidad trabaja en un laundry.  Ella cuenta que todos esos muchachos venían temprano en la mañana a ayudar al señor Efraín y que venían con mucho entusiasmo.

Emelina me hizo una comparación de precios de cuando empezó a la actualidad.

SERVICIO

ANTES

ACTUALIDAD

RUEDO

.25¢

$6.00

LAVADO DE CAMISA

.1 ¢  - .15¢

$2.50-3.00

LAVADO Y PLANCHADO DE PANTALON

.50¢

$3.00

Comenta la entrevistada que antes los gastos eran mínimos ya que ella misma hacia los ganchos, las bolsas y no había que pagar planillas.  Aunque se ganaba poco le daba para cubrir los gastos y las necesidades de la familia. Ella cuenta que antes, para los meses de octubre a diciembre, había mucho dinero.  Cuando llegaba la época de recoger café, gente de otros pueblos y del campo venían a Utuado a comprar café y hacían las compras para toda la familia.
Una anécdota, que me contó Emelina, es que arriba de su casa o sea en el tercer piso había un apartamento el cual ella alquilaba.  Hace 15 años vivió allí una señora que practicaba el espiritismo.  En el laundry había una máquina dañada y la inquilina bajó al negocio con velas, entre otras cosas, a rezar y desde ese día, comentó Emelina, entre risas,  no quedó máquina que no se dañara. 
Otra anécdota que me contó Emelina es que muchos años atrás en la parte posterior del negocio había un hueco en la pared.  Ella estaba en su casa cuando su vecina le gritó: “¡Emelina, Emelina se te metió alguien!” .  Ella inmediatamente bajó al negocio y vio al pillo detrás de una de las máquinas de lavar, cuando ella brinca para agarrarlo el muchacho fue más hábil y pudo huir por el mismo hueco que entró llevándose ropa del negocio.
La primera maquinaria industrial que su esposo compró fue en Ponce por menos de $3,000.00 y esto incluía una lavadora, secadora y plancha de vapor.  Emelina compara estos precios y dice que actualmente toda esta maquinaria puede costar más de $7,000.00.
Doña Emelina comenta que hoy en día es muy difícil mantener un laundry porque la maquinaria es muy costosa y los gastos para operar un negocio han aumentado.
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