Una mujer llamada Josefina Santiago…

Por: Olga N. Borrero Rivera

A través del tiempo, en Puerto Rico, fueron muchas las mujeres que actuaron como comadronas. El término comadrona, hace referencia a una persona encargada del cuidado de las mujeres durante su parto. Además de asistir en el parto, también estaba capacitada para la atención ginecológica durante el embarazo. Para el 1876, en Puerto Rico se aprobó el reglamento para el control de la profesión de la partería. Luego para el 1939 se establece que las comadronas debían estar autorizadas legalmente para serlo. Las comadronas en los tiempos pasados eran muy esenciales, ya que la gran mayoría del pueblo sufría de  necesidades y pobreza. El rol de las comadronas no era tan solo encargarse del parto, sino que también orientaban a las madres acerca de cómo cuidar al bebe y la salud de ellas. La mayoría de nuestros abuelos e incluso madres tuvieron la experiencia de haber dado a luz al servicio de una comadrona. Un ejemplo de una gran mujer que se dio la tarea de ser una comadrona de excelencia lo es, Doña Fela López.

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El 12 de octubre de 2014 tuve el placer de compartir unas horas en la tarde con la señora Josefina Santiago Pabón, también conocida como Fina. Le hice una entrevista sobre su experiencia al dar a luz con una comadrona, y otros pequeños detalles de su vida pasada. Josefina de 85 años, nació el 27 de agosto de 1929 en Caonillas, Utuado Puerto Rico. Al casarse con Leocadio Vélez, se mudó a Santa Isabel, Utuado.  De ahí en adelante ha vivido toda su vida en ese lugar. Fue ama de casa, trabajaba, limpiando ropa en rio, buscaba agua del pozo y no podía faltar la cocina. Fina tuvo siete hijos y un aborto. Dio a luz con comadrona todos sus hijos, excepto por una de sus hijas.

Su marido, Leocadio Vélez, era el que buscaba a la comadrona caminando. La comadrona que la atendió para todos sus partos fue Doña Fela López. Su primer hijo fue llamado Moisés, que hoy en el presente tiene 65 años de edad. Sobre Moisés, me habló muy poco, pero si me contó, que la comadrona la visitaba cada cierto tiempo y le aconsejaba en su embarazo. El día de su primer parto, fue de noche y según lo contado, todo salió bien y sin complicaciones. Según lo narrado por Fina, los instrumentos que utilizó la comadrona para el parto fueron: tijerilla (para cortar el cordón umbilical), toallas sanitarias, toallas, un bulto para cargar las cosas y una ponchera de porcelana (para bañar y limpiar él bebe).  La comadrona estuvo con ella todo el tiempo durante el parto. Al empezar el parto, Fela le decía exactamente qué hacer, y como acomodarse. Al nacer Moisés, ella lo limpió y rápidamente le informó a Fina que hacer desde ese momento en adelante con él bebe y le aconsejó lo que tenía que hacer en cuanto a su salud durante esa noche. Después de Moisés tuvo a Carmen (62 años de edad en el presente) y luego a Josefina (61 años de edad en el presente). Para su hija Josefina, fue el mismo proceso del primer parto. Luego de un tiempo de tener a Josefina, Fina quedo embarazada otra vez,  de  una niña llamada Olga. Tristemente Olga, con nueve meses y medio, falleció. Fina me contó que Olga antes de fallecer, no mostró algún síntoma de enfermedad ni nada parecido. Pero la noche antes de morir estaba mostrando síntomas de pulmonía y fiebre. Al día siguiente cuando la iban a llevar al médico a las 7:00 am había fallecido.

Tras un corto de tiempo de recuperación emocional por la pérdida, tuvo nuevamente otro hijo llamado Edgar (58 años de edad en el presente). Leocadio (49 años de edad en el presente) fue el siguiente. Fue muy interesante el nacimiento de Leocadio. Según Fina, fue por la tarde (no especificó la hora) cuando empezó a sentir contracciones. Doña Fela le sugirió que tenía que ir a un hospital ya que él bebé podía estar en mala posición o que tal vez el parto iba a tener complicaciones. Para esa época, no había carreteras, solo tierra, por lo tanto era difícil llegar a un lugar donde hubiera ambulancias. Fina inmediatamente aceptó la ayuda de uno de su vecino, el cual la tenía un Jeep antiguo. De camino a la ambulancia, Fina ya prácticamente estaba a punto de dar a luz, y justamente al montarse en la ambulancia, él bebé Leocadio llegó al mundo. Fina nunca olvidará ese momento cuando dio a luz en una ambulancia. No hubo complicaciones para el parto porque aquí hubo enfermeras que la atendieron. Finalmente, nació Minerva (48 años de edad en el presente), Minerva nació en el hospital, ya que la comadrona de Fina, Doña Fela le sugirió que diera a luz en el hospital, porque la bebé no estaba en posición y ella no podía atenderla en esa situación. Para todos sus partos con comadrona, luego de dar a luz, Fina tomaba caldo de pollo. Al día siguiente de cada parto, rápidamente Fina continuaba con su rutina de trabajo, y no tenía ningún tipo de descanso aparte de lo normal.

Fina no dio a luz a todos sus hijos en el hospital, ya que para ese tiempo era tan difícil conseguir transportación y económicamente no había lo suficiente dinero para conseguir la ayuda. Por las mismas razones mencionadas, no visitó a ningún médico luego de sus partos. Durante sus meses de embarazos, se cuidaba lo más que podía, pero se pasaba prácticamente todo el tiempo trabajando. La comadrona no cobraba por su servicio, sino que voluntariamente se le daba algo, cuando sobraba dinero. Al final de la entrevista, pude compartir un tiempo con Fina, hablando sobre que a pesar de que los tiempos cambian el que quiere triunfar en la vida, si se lo propone lo puede lograr. Se refiere a que antes la necesidad era mucha, pero con esfuerzo se lograban las cosas siempre. En lo personal fue una experiencia maravillosa, me encantó conocer la historia de Josefina Santiago y conocer sobre esos tiempos en los que ella vivió. Definitivamente admiro a mujeres como Josefina, que a pesar de las dificultades, salían hacia delante con sus hijos. Y sin duda la labor de Doña Fela, como comadrona, fue de un ángel en la tierra. Fue un placer hacer esta entrevista, espero que no sea mi última y les exhorto a que busquen y lean sobre la historia de Puerto Rico para la época de nuestros abuelos y abuelas.

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