Puentes con historias.
Por: Nicole J. Cortes Ocasio

Los puentes desde antiguos tiempos han sido de mucha utilidad ya que nos han permitido atrechar distancias. Todos traen con ellos alguna historia, como la trae el puente “Miguelito” conocido también como “La Playita”. Este puente se comenzó a construir en al año 1906 y  se finalizó su construcción en el 1908.   Era la forma más rápida para llegar al pueblo. Permitía la comercialización del café que para aquel tiempo era el producto principal de ventas. Hoy día conecta con la escuela María Libertad Gómez.

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El señor Eliezer Bermúdez Gonzales el cual es dueño y agricultor de una finca en Caguana desde su niñez siempre ha escuchado la misma historia sobre el puente “Miguelito” conocido actualmente como “La Playita”. A su nacimiento el puente ya se encontraba. Relata Bermúdez Gonzales que Miguel conocido como “Miguelito’’ fue un médico utuadeño  amigo de Teodoro Roosevelt el cual conoció cazando en Maryland. Un día Roosevelt visitó a Puerto Rico y decidió ir a ver a su amigo Miguel en su pueblo Utuado. Cuando se encontraba en Utuado el automóvil de Roosevelt tuvo un desperfecto y quedó atascado en el rio Abacoa.  Miguel en su caballo mientras trataba de ayudar el auto tuvo una pequeña explosión la cual provocó que el caballo se asustara y Miguel cayera al agua. Roosevelt lo ayudó a salir del agua. A raíz de ese suceso decide que hay que construir un  puente, que les permitiera a sus habitantes acortar camino. Esta es la razón por la cual lleva el nombre “Miguelito”, conocido por sus habitantes como “La Playita”.  Se le conoce también  como “La Playita” ya que en su sector se encontraban palmeras y lo relacionaban con la playa.

La estructura del puente actualmente no se encuentra en muy buenas condiciones. Diariamente muchas personas lo utilizan. Las agencias pertinentes deberían de tomar cartas en el asunto ya que se puede considerar un  monumento histórico. Es una parte de la historia del pueblo de Utuado. Es importante conservar el puente ya que al conservarlo cuidamos nuestro legado cultural.

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