Para conocer detalles sobre la huelga del 2010 en la Universidad de Puerto Rico entrevisté a Ángel Pérez Soler y esto fue lo que me contó: “Esta huelga se dio por dos razones: asuntos internos de la Universidad de Puerto Rico, en relación al recorte de exenciones de matrícula para estudiantes y por la situación del país en general, y con esto me refiero a la ley 7 implementada bajo la administración de Fortuño. El liderato fue uno bastante horizontal, había unos portavoces, pero las decisiones eran colectivas. Duró alrededor de dos años. Mayormente hubo mucha solidaridad de parte de lo/as padres y madres de los estudiantes, aunque también se solidarizó la comunidad. La Hermandad de Empleados Exentos No Docentes colaboró mucho como también los profesores. Hubo actividades de todo tipo y se logró concientizar en gran parte gracias a las redes sociales y al activismo en la calle. La idea era problematizar y hacer que otros sectores del país también protestaran las medidas de austeridad que se imponían y se pretenden imponer hoy también. Participaron todos los recintos del sistema UPR. De las represalias que hubo fue que suspendieron a un grupo de estudiantes y en las manifestaciones que se realizaban, arrestaron a decenas de estudiantes. La huelga culminó porque hubo una negociación por parte del estudiantado con la administración de la UPR.”

Iván Cartagena Rosario fue mi entrevistado en relación a la huelga del 2017. Sobre el particular me dijo: “Las razones por las que surgió la huelga, fue por la imposición de una Junta de Control Fiscal y su plan para cobrar la deuda puertorriqueña ilegal. Querían cobrarla con medidas de austeridad, es decir, alza de matrícula, despidos de empleados públicos, recortes a la salud, entre otras. En nuestro movimiento no había líderes, se escogían portavoces por medio del pleno, había una democracia participativa de forma horizontal. Duró casi dos meses. Hubo participación de la comunidad. Si, hubo participación de profesores, secretarias, empleados de áreas verdes y de personal de la biblioteca. Realizábamos foros, cine foros, talleres educativos de educación emancipadora, brigadas agrícolas, entre otras. Los logros fueron lograr la visibilidad de las medidas austeridad tanto en el país como internacionalmente. De los recintos que recibimos apoyo, fueron Cayey, Rio Piedras, Aguadilla y Mayagüez. Hubo una demanda contra tres portavoces, pero no obtuvieron cargos judiciales. La huelga finalizó por drenaje estudiantil y por la caída a nivel sistemático de los recintos.”