Huelgas en la Montaña
Por: Arlenne Maldonado Feliciano

Tuve la oportunidad de entrevistar a Marielys Maldonado joven que era estudiante en el recinto de Utuado durante el 2010 y al joven Raymond Méndez el cual estuvo en el recinto para la huelga más reciente, la del 2017. La huelga de 2017 en la Universidad de Puerto Rico recinto de Utuado fue una que impactó mi vida como estudiante y mas aún que estos hechos ocurrieron en mi ultimo año de escuela superior. Recuerdo haber llegado un día a la escuela y escuchaba sobre un plan ya tomando forma el cual daría pie a una gran unión entre los estudiantes de la escuela superior Luis Muñoz Rivera y la Universidad de Puerto Rico recinto de Utuado. Me pareció interesante las actitudes y el interés que tomaban los estudiantes al escuchar lo que se quería llevar acabo. El grupo de estudiantes se formaba mayormente de los del duodécimo grado ya que nosotros seriamos afectados por lo que se quería implementar. Sumado a esto se integraban un grupo de maestros, pero, específicamente había dos maestros que de paso son un matrimonio los cuales fomentaban entre los estudiantes el luchar por sus derechos y por lo que más les convenga a estos.

Uno de los recintos que no tuvo mucha resistencia fue el de Aguadilla al cual hoy día pertenezco como estudiante. En dicho recinto, se estableció que se llevaría a cabo la huelga si estos cumplían con una cuota establecida de estudiantes. Al no cumplir con esa cuota se dejaría a un lado la huelga y continuaría todo igual. De cumplir con la cuota, estos tendrían de jueves a domingo hasta medianoche para poder manifestarse. Los días de lunes a miércoles se ofrecerían clases y se alternarían los días. De esta manera se cumpliría con culminar el semestre, pero a la vez continuar con la lucha. Al final, no se cumplió con la cuota requerida así que el recinto desistió de la idea de tener una huelga. Luego, hicieron una asamblea donde eligieron volver al paro. En este recinto tuvo un gran impacto el consejo de estudiantes de esta ya que estos se oponían a una huelga indefinida.

Estas huelgas, tanto la del 2010 como la del 2017 tenían el fin de parar con el plan que se quería implementar de aumentar el costo de matricula hasta quitar beneficios para los estudiantes. Según me contaba la joven Marielys, desde su perspectiva, la huelga del 2010 fue cuando más se sintió el apoyo de la comunidad y del país. Esta me comentó que “Padres, profesores y personas de la comunidad se acercaban a los estudiantes en los portones para extenderle la mano ya fuera con comida o hasta quedándose con ellos allí.” También, contestó a mi pregunta de cuál era la razón de esta, y me dijo lo siguiente, “En la huelga del 2010 se enfrentaba un alza de una cuota de 800 dólares.” En el 2017 la universidad enfrentaba un recorte presupuestario de 500 millones. Siendo esto motivo de ambas huelgas. Conversando con el joven Raymond, este me contó que el argumento principal de los estudiantes era que la comunidad universitaria no tiene culpa del despilfarro que se ha hecho en el gobierno con el dinero.

Marielys me comentaba que la huelga del 2010 fue mas extensa de la del 2017 y contaba con mucho mas apoyo de la comunidad universitaria. Por otra parte, Méndez me explicaba por el proceso el cual los jóvenes pasaban todos los días, “En el campamento de la universidad los estudiantes tenían un itinerario para sus actividades durante el día y donde estos se dividían el trabajo. En la mañana todo el mundo se levantaba temprano y se dividían las tareas por grupos, unos se encargaban del huerto, otros de la limpieza y hacían tres grupos para la cocina, unos para la mañana, otros para el almuerzo y otros para la cena. Durante el día también se hacían conversatorios, forros educativos, y en las noches en algunas se hacían cine foros y en otros círculos de lecturas. Los visitaban muchas personas para donarles agua y alimentos, lo otro lo sacaban del huerto.” Al igual que en el 2010, personas les ayudaban llevándoles alimentos y agua. Además, estos atendían a los animales en el recinto y los huertos. Esto último, Marielys me dijo que también se hizo en el 2010.

Según lo recordado por Marielys era que “La universidad suspendió a dos estudiantes por haber estado dentro de las instalaciones en el 2010 y en este mismo año otras universidades mostraron su apoyo y llegaron hasta el recinto. Los estudiantes en ambos años se organizaban para seguir la manifestación día y noche. La asamblea del 2010 contó con suficiente asistencia donde la mayoría estuvo de acuerdo en consolidar un paro, estas votaciones fueron en la cancha del recinto.” Raymond me recalcaba que uno de los eventos importantes en el 2017 fue cuando demandaron a los estudiantes que seguían en los portones alegando que el proceso mediante el cual se hicieron las votaciones fue ilegitimo. Tanto Marielys como Raymond coincidieron en que ambas huelgas tuvieron sus momentos de rebeldía donde los estudiantes se enfrentaron a rectores, políticos y demás personas a las cuales ellos querían llevarles su punto de vista. En la huelga del 2010 se logró que no se implantara la cuota de 800 dólares mientras en la del 2017 no se pudo lograr mucho debido a que la resistencia de muchos recintos no fue la esperada y eran amenazados con quitarles la elegibilidad a la beca pell y  demandas, entre otras cosas.

La lucha por la educación viene de mucho tiempo atrás y cada vez serán más los que defiendan la misma. En un país, la educación debe ser accesible para todos sobre todo en el plan de gobierno debe ser una de las prioridades a darle énfasis. Al sistema educativo, que ya está débil, no se le puede seguir quitando de lo poco que le queda. En las escuelas publicas los materiales y maestros son escasos como para que entonces también le restemos importancia a los estudios universitarios de cada puertorriqueño/a. En el 2017 sonó entre los estudiantes y llegó a los oídos de todo el país el auditar la deuda para saber a donde fueron los millones que hoy día andan queriendo buscar recortando a las demás agencias gubernamentales, pero en especial al sistema UPR. Los estudiantes no tienen culpa de las malas decisiones de todos los gobiernos.