Algunas Memorias del Lago la Plata

El Lago La Plata es un lugar excepcional, hermoso y tranquilo. Se preguntarán por que lo describo con tanta elocuencia y  es porque vivo allí. Las personas disfrutan de esa  creación de la naturaleza pero, la realidad es que este lago fue creado por el ser humano. Este lago comprende una represa de 131 pies sobre el rio La Plata. El lago cubre un área de 800 acres. Las profundidades máximas son de alrededor de 100 pies. La represa y el lago fueron construidos en el año 1974. Esto fue hace 40 años. Con sus compuertas cerradas tiene una capacidad de 33,000 acres Está localizada en el pueblo de Toa Alta. El agua que nutre el lago es utilizada para uso doméstico del área metropolitana de Puerto Rico.

En las memorias de Awilda Espinell Vázquez quedan recuerdos de la historia de su niñez y de lo que vivieron sus padres y abuelos durante la construcción del lago La Plata. Para esta época ella contaba con 33 años. Nos cuenta que donde ella vivía no era un poblado como tal, era más como familias con sus fincas, sus rebaños, y sembradíos. Algunas fincas estaban bien pegadas y otras no.

A su familia, que vivía cerca del rio Guadiana y que forma parte del lago La Plata, le expropiaron alrededor de 5 cuerdas de terreno. Lo que les pagaban en este tiempo por las tierras ella no lo recuerda pero si dependía de la cantidad de tierra que les quitaban. A la mayoría de las familias que vivían cerca del rio les llegaron a expropiar sus tierras, a ellos más porque vivían cerca de la construcción de la represa.

La vida de estas familias era bastante tranquila como ella describe ya que nadie tenía problemas y la mayoría eran familias o amigos. El mayor problema que vino con la construcción fue que al construir el lago quedaron incomunicados ya que dividieron el barrio. Según ella lo describe y cito: “El sector donde yo vivo se llama Sector Espinell. El único puente que había para llegar al pueblo quedó bajo el agua. La única manera de salir era cruzar por el borde del rio con el temor de caer en el agua o caminar hasta tomar una guagua que tenía que darle la vuelta al barrio para poder salir ya que no había otra manera. Esto también ocurrió en otros sectores.”  Continuó diciendo: “En una ocasión la comunidad se fue en un paro para exigir sus derechos. Y fue así cuando se inició la construcción del puente existente en el barrio Guadiana.”

En la actualidad Awilda cuenta con 71 años y si todavía vive en el Barrio Guadiana en Naranjito, Puerto Rico. Como dato curioso sobre el rio La Plata está el único puente en su clase en Puerto Rico,  El Puente Atirantado.